Los lentes de contacto son una excelente alternativa a los anteojos tradicionales para corregir la visión. Sin embargo, a menudo están rodeados de una serie de mitos y conceptos erróneos que pueden generar dudas e inseguridades en quienes consideran usarlos. Acompáñanos a explorar algunos de los mitos más comunes sobre los lentes de contacto y analizaremos las realidades detrás de ellos. Despejaremos tus dudas y te brindaremos información precisa y actualizada para ayudarte a tomar decisiones informadas sobre el uso de lentes de contacto.
Mito 1: Los lentes de contacto son incómodos
Uno de los mitos más populares acerca de los lentes de contacto es que son incómodos. La realidad es que los avances en tecnología han permitido el desarrollo de lentes de contacto altamente cómodos y adaptados a diferentes necesidades. Los lentes de contacto modernos están diseñados para adaptarse a la forma única del ojo y proporcionar una visión clara y nítida sin causar molestias significativas.
Es posible que al principio se requiera un breve período de adaptación para acostumbrarse a la sensación de tener un cuerpo extraño en el ojo, pero la mayoría de las personas se adaptan rápidamente y encuentran que los lentes de contacto son muy cómodos de usar durante todo el día.
Mito 2: Los lentes de contacto pueden perderse detrás del ojo
Este mito es completamente falso. El ojo humano tiene una membrana llamada conjuntiva que cubre la superficie interna de los párpados y se une a la parte blanca del ojo. Esta membrana forma una barrera que impide que los lentes de contacto se deslicen hacia la parte posterior del ojo. Además, el lente de contacto es más grande que el espacio entre los párpados, lo que hace físicamente imposible que se "pierda" detrás del ojo. Incluso si un lente de contacto se desplazara ligeramente, se puede recuperar fácilmente moviendo suavemente el ojo o parpadeando.
Mito 3: Los lentes de contacto pueden dañar los ojos
Es comprensible que algunas personas tengan preocupaciones sobre la seguridad de los lentes de contacto. Sin embargo, cuando se les da el cuidado adecuado, los lentes de contacto son seguros para la mayoría de las personas. Es fundamental que sigas las recomendaciones de uso y cuidado proporcionadas por el optometrista u oftalmólogo para garantizar una experiencia segura y saludable.
Esto incluye lavarse las manos antes de manipular los lentes, seguir un régimen de limpieza y desinfección regular, y reemplazar los lentes según las indicaciones. Mira todas las recomendaciones aquí.
Además, es importante que solicites exámenes oculares periódicos para que un profesional evalúe la salud de los ojos y ajuste cualquier problema relacionado con el uso de lentes de contacto.
Mito 5: Los lentes de contacto son difíciles de mantener limpios
Mantener limpios los lentes de contacto es esencial para una buena salud ocular. Con los productos adecuados y siguiendo las pautas proporcionadas por los profesionales de la visión, el cuidado de los lentes de contacto se vuelve bastante sencillo. Existen soluciones de limpieza y desinfección específicas para lentes de contacto que ayudan a eliminar los depósitos y las bacterias. Siguiendo las instrucciones adecuadas de limpieza, es posible que mantengas tus lentes de contacto en óptimas condiciones.
Mito 6: Los lentes de contacto son solo para personas con problemas de visión graves
Los lentes de contacto no están limitados a personas con problemas de visión graves. De hecho, hay una amplia variedad de lentes de contacto disponibles para diferentes necesidades, incluyendo aquellos diseñados para la corrección de miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia. De hecho, las personas con una visión cercana o lejana relativamente saludable pueden optar por lentes de contacto para mejorar su comodidad visual o como una alternativa estética en comparación con los anteojos.
Sin embargo, algunas condiciones oculares como el ojo seco crónico o ciertos trastornos de la córnea, pueden hacer que el uso de lentes de contacto sea incómodo o incluso peligroso. Es importante consultar con un profesional de la salud visual para determinar si los lentes de contacto son adecuados para ti.
Mito 7: Usar lentes de contacto puede causar infecciones o daños oculares
Si bien es cierto que existe un pequeño riesgo de infección o daño ocular asociado con el uso de lentes de contacto, este riesgo puede minimizarse si sigues las pautas de uso adecuadas y mantienes una buena higiene ocular.
Mito 8: Los lentes de contacto son más costosos que los lentes de armazón
Contrario a lo que algunas personas pueden pensar, los lentes de contacto suelen tener costos razonables. Además, reemplazar un lente de contacto perdido puede ser fácil y barato en comparación con la sustitución de lentes de armazón perdidos o dañados.
Mito 9: Los lentes de contacto se pegan en los ojos
Es muy poco probable que esto ocurra. Los lentes de contacto se pueden retirar del ojo fácilmente usando el método recomendado por su profesional de la visión. Todo lo que necesitas es práctica y paciencia.
Además, a diferencia de los anteojos, los lentes de contacto se adhieren directamente al ojo, lo que brinda una visión periférica que no está limitada por el marco de los anteojos. De hecho, son la opción número uno para los deportistas ya que les permiten tener un campo de visión amplio y una mayor comodidad. Conoce más acerca de el deporte y los lentes de contacto.
Recuerda que es fundamental seguir las recomendaciones de tu profesional de la salud visual y realizar revisiones regulares para asegurarte que estás utilizando los lentes de contacto de manera segura y adecuada.
Fuentes:
Acuvue.com. Derribando los mitos de los lentes de contacto. Disponible en: https://www.acuvue.com.co/por-que-lentes-de-contacto/mitos-lentes-de-contacto . (Consultado en mayo de 2023)
